LuisCarlos17f
Member
A veces veo en youtube AMV (Anime Media Videos) con escenas de anime, pero también últimamente está surgiendo una industria mediática de "donghua" (animación china, el equivalente chino al cómic manga es manhua, manhwa y aeni son cómic y animación coreana respectivamente).
Entonces me he preguntado cómo sería posible un D&D para el mercado asiático, con sus propios gustos y límites. Debemos recordar que hoy en día "Aventuras Orientales", uno de los títulos más famosos de D&D es tachado de políticamente incorrecto ya con sólo el título, aparte del "niponcentrismo" del tomo. También hay que añadir que la relación entre las principales potencias asiáticas, China, Japón y Corea del Sur es mucho peor que las antiguas rivalidades entre europeos, por decirlo suavemente. Soy consciente de que les pueda ofender una obra de fantasía basada en el lejano oriente con reinos cuyas culturas son "chup-suey", es decir, mezcla de diferentes naciones reales, aunque creo que esto podría ser necesario para evitar polémicas analogias (por ejemplo comparar a los oni/ogro mago con el imperio japonés durante la 2GM o los clanes de Jian-Shi..).
Yo veo en sus webcomics las razas de fantasía no humanas suelen ser "kemonomimi" (orejas de animal), es decir, humanoides con algunos rasgos de animal, y quizás también algún tanuki (mapache antropomórfico), pero salvo esas excepciones suelen ser demasiados homogéneos racialmente. En el manga sí suele haber otros humanoides, incluso el subgénero de chica-monstruo o novia extraterrestre.
Deberían dejar espacio para futuras nuevas clases, como una actualización de los adeptos marciales (Tomo de Batalla: Libro de las Nueve Españdas) o Magia del Incarnum (como el chamán totemista).
Sobre las razas de PJs algunas son interesantes como trasfondo, pero sus rasgos raciales no son tan útiles en determinados ambientes. Se podría añadir nuevas razas como el dokkaebi (del folclore coreano), el primo kami/feérico de los tielflings, o tsukumogami, constructos vivientes basados en objetos mundanos muy antiguos cuyo espíritu interior despierta y cobra vida.
A los korobokuru ( = hombrecillo debajo de una hoja) los presentaría como pequeños humanoides famosos por la costumbre de llevar sombreros o sombrillas tradicionales creadas con hojas de fuki(petasites japonicus) como símbolos de buena fortuna. Los tanuki (duendes-mapache) tendrían otra tradición de llevar dos grandes zurrones (de color dorado) por debajo de la cintura....como símbolo de masculinidad y riqueza.
Los PJs hengeyokai podrían transformarse en un animal, pero con ciertos límites en los primeros niveles (imaginad un PJ que se puede transformar en gorrión que puede cruzar una mazmorra sin tocar suelo ni paredes evitando posibles trampas, o volar hasta la ventana más alta de cierta torre para dejar una piedra con una runa de teletransportación..).
* ¿Me recomendáis algún buen manhwa o manhua de fantasía (con estética oriental) que pueda servir de inspiración para partidas ambientadas en Kara-Tur? Por ejemplo the ghostly doctor, o la princesa psíquica.
Entonces me he preguntado cómo sería posible un D&D para el mercado asiático, con sus propios gustos y límites. Debemos recordar que hoy en día "Aventuras Orientales", uno de los títulos más famosos de D&D es tachado de políticamente incorrecto ya con sólo el título, aparte del "niponcentrismo" del tomo. También hay que añadir que la relación entre las principales potencias asiáticas, China, Japón y Corea del Sur es mucho peor que las antiguas rivalidades entre europeos, por decirlo suavemente. Soy consciente de que les pueda ofender una obra de fantasía basada en el lejano oriente con reinos cuyas culturas son "chup-suey", es decir, mezcla de diferentes naciones reales, aunque creo que esto podría ser necesario para evitar polémicas analogias (por ejemplo comparar a los oni/ogro mago con el imperio japonés durante la 2GM o los clanes de Jian-Shi..).
Yo veo en sus webcomics las razas de fantasía no humanas suelen ser "kemonomimi" (orejas de animal), es decir, humanoides con algunos rasgos de animal, y quizás también algún tanuki (mapache antropomórfico), pero salvo esas excepciones suelen ser demasiados homogéneos racialmente. En el manga sí suele haber otros humanoides, incluso el subgénero de chica-monstruo o novia extraterrestre.
Deberían dejar espacio para futuras nuevas clases, como una actualización de los adeptos marciales (Tomo de Batalla: Libro de las Nueve Españdas) o Magia del Incarnum (como el chamán totemista).
Sobre las razas de PJs algunas son interesantes como trasfondo, pero sus rasgos raciales no son tan útiles en determinados ambientes. Se podría añadir nuevas razas como el dokkaebi (del folclore coreano), el primo kami/feérico de los tielflings, o tsukumogami, constructos vivientes basados en objetos mundanos muy antiguos cuyo espíritu interior despierta y cobra vida.
A los korobokuru ( = hombrecillo debajo de una hoja) los presentaría como pequeños humanoides famosos por la costumbre de llevar sombreros o sombrillas tradicionales creadas con hojas de fuki(petasites japonicus) como símbolos de buena fortuna. Los tanuki (duendes-mapache) tendrían otra tradición de llevar dos grandes zurrones (de color dorado) por debajo de la cintura....como símbolo de masculinidad y riqueza.
Los PJs hengeyokai podrían transformarse en un animal, pero con ciertos límites en los primeros niveles (imaginad un PJ que se puede transformar en gorrión que puede cruzar una mazmorra sin tocar suelo ni paredes evitando posibles trampas, o volar hasta la ventana más alta de cierta torre para dejar una piedra con una runa de teletransportación..).
* ¿Me recomendáis algún buen manhwa o manhua de fantasía (con estética oriental) que pueda servir de inspiración para partidas ambientadas en Kara-Tur? Por ejemplo the ghostly doctor, o la princesa psíquica.